viernes, 24 de septiembre de 2010

encuesta para la gente


1-¿Te gusta la página?
2-¿Te ayudan los consejos?
3-¿Qué le cambiarías ?
4-¿Te haz informado lo suficiente?
5-¿Te sientes identificado ?
6-¿Que le integrarías a la página?
7-¿Como esta funcionando la pagina?
8-¿Que otro tipo de información podría crear?
9-¿La información obtenida te a ayudado de alguna manera?
10-¿Que opinas de la agresión hacia esos niños ?

viernes, 3 de septiembre de 2010

¿Qué hay que hacer en estos casos?



Si nos encontramos ante un caso de acoso o "bullying", debemos intentar convencer a la víctima de que recurra a la ayuda de sus padres y profesores y denunciar cuanto antes dicho estado.
Si el acosado no quiere colaborar a solucionar el problema, la situación se vuelve más difícil. Para ayudarlo, se le tiene que demostrar que puede contar con ayuda de los mayores en cualquier momento, y así, irá recuperando la confianza y, con el tiempo, superar esta situación. Para que esto funcione, generalmente, es indispensable el apoyo y la amistad de un cierto número de personas que le defiendan de sus enemigos.

¿Cómo prevenir el bullying?

El profesional de Integramédica dice que una forma de prevenir el matonaje escolar es conversar frecuentemente con los hijos e hijas, generando instancias de diálogo y desarrollar las habilidades sociales de los niños, por ejemplo, a través de la participación en actividades extraescolares; y reforzando su autoestima, mediante el manejo de límites –basado en premios y no en castigos–.

El doctor Mosca destaca que el colegio y los educadores en particular, también juegan un papel clave en este proceso, enseñándoles a los menores el respeto por uno mismo y los demás.

“Hay escuelas que han tomado en serio este problema y han llevado a cabo políticas de tolerancia cero a las burlas o la discriminación, así como realizado capacitación a monitores en resolución de conflictos que intervengan buscando acuerdos y dialogo entre los alumnos que tengan conflictos, utilizando carteles en los pasillos alusivos a lo negativo del matonaje y la sugerencia de que la victima denuncie y la búsqueda de actitudes de integración grupal”, afirma.

El doctor Mosca asegura que para evitar que un niño o niña sea quien genere discriminación o matonaje escolar frente a los demás menores es importante que los padres le ayuden a reconocer sus propias debilidades y a respetar las de los otros, aceptándolas como parte de la diversidad. “Es necesario evitar un excesivo perfeccionismo y exitismo, y las actitudes déspotas o descalificadoras de los padres hacia el menor”, sostiene.

Tipos de acoso escolar

El acoso escolar se divide en dos categorías:
1. Acoso directo: es la forma más común entre los niños. Peleas y agresiones físicas.
2. Acoso indirecto: suele ser más común entre las niñas y en general a partir de la preadolescencia. Se caracteriza por pretender el aislamiento social del individuo. Este aislamiento se consigue mediante técnicas variadas que incluyen: difundir rumores, rechazar el contacto social con la víctima, amenazar a los amigos, hacer criticas de la persona aludiendo a sus rasgos físicos, grupo social, forma de vestir, religión, raza, discapacidad, etcétera.
Por ello, el maltrato entre compañeros puede aparecer de formas muy diversas. Las más comunes son:
• Verbales tales como insultos, motes, hablar mal de alguien, rumores,...
• Psicológicas amenazas para lograr algo de la víctima, para ejercer poder sobre ella.
• Agresiones físicas peleas, palizas, pequeñas acciones insignificantes pero que ejercen presión sobre el individuo al hacerse de forma reiterada, pequeños hurtos,...
• Aislamiento social, marginando, ignorando su presencia y no contando con él/ella en las actividades normales entre amigos o compañeros de clase

Recuadro: perfiles del matón escolar y de sus víctimas


La víctima

Sexo: es tan frecuente en hombres como en mujeres

Aspecto: generalmente destaca del resto por sus diferencias y/o defectos, y responden a estereotipos como el guatón, el mateo o el flojo del curso, habitualmente presentando además un aspecto débil.

Dimensiones de personalidad: establece relaciones interpersonales con alto grado de timidez, tendencia al retraimiento y aislamiento social, y, generalmente, muestran tendencia al disimulo.

Tipos de víctima:

– Pasiva: es la más común. Mayoritariamente, son inseguros, callados y no responden al insulto.

– Activa: combina un modelo de ansiedad y de reacción agresiva, lo que es utilizado por el agresor para excusar su propia conducta frente a los demás. Suelen ser alumnos que se comportan de forma irritante y provocan reacciones negativas de sus compañeros.

El matón

Sexo: es más frecuente en hombres.

Aspecto físico: fuerte en términos físicos y/o sicológicos.

Dimensiones de personalidad: establece una dinámica relacional agresiva con aquellos que considera débiles o cobardes. Generalmente, es impulsivo y no siente empatía por los sentimientos de la víctima, carece del sentido de culpa, se considera líder y muestra una alta autoestima frente al resto.

Tipos del matón:

– Activo directo: en la mayoría de los casos realiza la agresión personalmente y establece relaciones directas con la o las víctimas.

– Activo indirecto: dirige el comportamiento de sus seguidores, induciéndolos a actos de matonaje hacia otros pares.

– Pasivo: sigue al agresor, pero no participa. A veces siente pena y lástima por la víctima, pero no se atreve a expresarlo frente a sus pares.

El grupo

Dimensiones: favorece la violencia y la pasividad de sus integrantes frente a los actos de matonaje. Generalmente, la intención de sus miembros al participar de estos grupos es defensiva, es decir, participan como una forma de evitar convertirse en posibles blancos (“mientras se lo hacen a otros, no me lo hacen a mí”). La mayoría de las veces, como una forma de destacar, pasan de ser de simples observadores a cómplices de la agresión para así encontrar apoyo en el grupo.

viernes, 20 de agosto de 2010

El agresor: características psicológicas y entorno familiar


Aunque el acosador escolar no tiene por qué padecer ninguna enfermedad mental o trastorno de la personalidad grave, presenta normalmente algún tipo de psicopatología. Fundamentalmente, presenta ausencia de empatía y algún tipo de distorsión cognitiva.
La carencia de empatía explica su incapacidad para ponerse en el lugar del acosado y ser insensible al sufrimiento de este.
La presencia de distorsiones cognitivas tienen que ver con el hecho de que su interpretación de la realidad suele eludir la evidencia de los hechos y suele comportar una delegación de responsabilidades en otras personas. Así, normalmente responsabiliza de su acción acosadora a la víctima, que le habría molestado o desafiado previamente, con lo que no refleja ningún tipo de remordimiento respecto de su conducta (los datos indican que, aproximadamente, un 70% de los acosadores responden a este perfil).
La psicología actual, por otra parte, identifica en los acosadores escolares la existencia probable de una educación familiar permisiva que les puede haber llevado a no interiorizar suficientemente bien el principio de realidad: los derechos de uno deben armonizarse con los de los demás. La consecuencia es la dificultad para ponerse en el lugar del otro por una carencia de altruismo vinculada a anego que crece a costa de los demás, meros instrumentos a su servicio, y que tiene un umbral de frustración muy bajo. Algunos autores denominan a este tipo de niño como niño tirano.

viernes, 2 de julio de 2010

Prevención

Se estima que la intervención simultánea sobre factores individuales, familiares y socioculturales, es la única vía posible de prevención del acoso escolar. La prevención se puede realizar en distintos niveles.
Una prevención primaria sería responsabilidad de los padres (apuesta por una educación democrática y no autoritaria), de la sociedad en conjunto y de los medios de comunicación (en forma de autorregulación respecto de determinados contenidos).
Una prevención secundaria sería las medidas concretas sobre la población de riesgo, esto es, los adolescentes (fundamentalmente, promover un cambio de mentalidad respecto a la necesidad de denuncia de los casos de acoso escolar aunque no sean víctimas de ellos), y sobre la población directamente vinculada a esta, el profesorado (en forma de formación en habilidades adecuadas para la prevención y resolución de conflictos escolares).
Por último, una prevención terciaria serían las medidas de ayuda a los protagonistas de los casos de acoso escolar

Tipos de acoso escolar

Bloqueo social :
Agrupa las acciones de acoso escolar que buscan bloquear socialmente a la víctima. Todas ellas buscan el aislamiento social y su marginación impuesta por estas conductas de bloqueo.
Son ejemplos las prohibiciones de jugar en un grupo, de hablar o comunicar con otros, o de que nadie hable o se relacione con él, pues son indicadores que apuntan un intento por parte de otros de quebrar la red social de apoyos del niño.
Se incluye dentro de este grupo de acciones el meterse con la víctima para hacerle llorar. Esta conducta busca presentar al niño socialmente, entre el grupo de iguales, como alguien flojo, indigno, débil, indefenso, estúpido, llorica, etc. El hacer llorar al niño desencadena socialmente en su entorno un fenómeno de estigmatización secundaria conocido como mecanismo de chivo expiatorio. De todas las modalidades de acoso escolar es la más difícil de combatir en la medida que es una actuación muy frecuentemente invisible y que no deja huella. El propio niño no identifica más que el hecho de que nadie le habla o de que nadie quiere estar con él o de que los demás le excluyen sistemáticamente de los juegos


Hostigamiento:
Agrupa aquellas conductas de acoso escolar que consisten en acciones de hostigamiento y acoso psicológico que manifiestan desprecio, falta de respeto y desconsideración por la dignidad del niño. El desprecio, el odio, la ridiculización, la burla, el menosprecio, los motes, la crueldad, la manifestación gestual del desprecio, la imitación burlesca son los indicadores de esta escala




Amenaza a la integridad:
Agrupa las conductas de acoso escolar que buscan amilanar mediante las amenazas contra la integridad física del niño o de su familia, o mediante la extorsión.

Manipulación social:
Agrupa aquellas conductas de acoso escolar que pretenden distorsionar la imagen social del niño y “envenenar” a otros contra él. Con ellas se trata de presentar una imagen negativa, distorsionada y cargada negativamente de la víctima. Se cargan las tintas contra todo cuanto hace o dice la víctima, o contra todo lo que no ha dicho ni ha hecho. No importa lo que haga, todo es utilizado y sirve para inducir el rechazo de otros. A causa de esta manipulación de la imagen social de la víctima acosada, muchos otros niños se suman al grupo de acoso de manera involuntaria, percibiendo que el acosado merece el acoso que recibe, incurriendo en un mecanismo denominado “error básico de atribución
Coacción:
Agrupa aquellas conductas de acoso escolar que pretenden que la víctima realice acciones contra su voluntad. Mediante estas conductas quienes acosan al niño pretenden ejercer un dominio y un sometimiento total de su voluntad.
El que la víctima haga esas cosas contra su voluntad proporciona a los que fuerzan o tuercen esa voluntad diferentes beneficios, pero sobre todo poder social. Los que acosan son percibidos como poderosos, sobre todo, por los demás que presencian el doblegamiento de la víctima. Con frecuencia las coacciones implican que el niño sea víctima de vejaciones, abusos o conductas sexuales no deseadas que debe silenciar por miedo a las represalias sobre sí o sobre sus hermanos



Exclusión social:
Agrupa las conductas de acoso escolar que buscan excluir de la participación al niño acosado. El “tú no”, es el centro de estas conductas con las que el grupo que acosa segrega socialmente al niño. Al ningunearlo, tratarlo como si no existiera, aislarlo, impedir su expresión, impedir su participación en juegos, se produce el vacío social en su entorno.
Intimidación:
Agrupa aquellas conductas de acoso escolar que persiguen amilanar, amedrentar, apocar o consumir emocionalmente al niño mediante una acción intimidatoria. Con ellas quienes acosan buscan inducir el miedo en el niño. Sus indicadores son acciones de intimidación, amenaza, hostigamiento físico intimidatorio, acoso a la salida del centro escolar.

La televisión:
El mensaje implícito de determinados programas televisivos de consumo frecuente entre adolescentes que exponen un modelo de proyecto vital que busca la aspiración a todo sin renunciar a nada para conseguirlo, siempre y cuando eso no signifique esforzarse o grandes trabajos, constituye otro factor de riesgo para determinados individuos.
Los expertos han llegado también a la conclusión de que la violencia en los medios de comunicación tiene efectos sobre la violencia real, sobre todo entre niños. Se discute, no obstante, el tipo de efectos y su grado: si se da una imitación indiscriminada, si se da un efecto insensibilizador, si se crea una imagen de la realidad en la que se hiperboliza la incidencia de la violencia, etc.

El entorno escolar

Se puede dar el caso de que la ausencia en clase (o, en general, en el centro educativo) de un clima adecuado de convivencia pueda favorecer la aparición del acoso escolar. La responsabilidad al respecto oscila entre la figura de unos profesores que no han recibido una formación específica en cuestiones de intermediación en situaciones escolares conflictiva, y la disminución de su perfil de autoridad dentro de la sociedad actual

Causas del bullying


Bullying es una palabra inglesa que significa intimidación. Infelizmente, es una palabra que está de moda. Debido a los numerosos casos de persecución y de agresiones que se están detectando en las escuelas y colegios, y que están llevando a muchos escolares a vivir situaciones verdaderamente aterradoras. El Bullying se refiere a todas las formas de actitudes agresivas, intencionadas y repetidas, que ocurren sin motivación evidente, adoptadas por uno o más estudiantes contra otro u otros. El que ejerce el bullying lo hace para imponer su poder sobre el otro, a través de constantes amenazas, insultos, agresiones, vejaciones, etc., y así tenerlo bajo su completo dominio a lo largo de meses e incluso años. El maltrato intimidatorio le hará sentir dolor, angustia, miedo, a tal punto que, en algunos casos, puede llevarle a consecuencias devastadoras como el suicidio. El bullying no entiende de distinciones sociales o de sexo. A pesar de la creencia extendida de que los centros escolares situados en zonas menos favorecidas son por definición más conflictivos, lo cierto es que el bullying hace su presencia en casi cualquier contexto. Respecto al sexo, tampoco se aprecian diferencias, al menos en lo que respecta a las víctimas, puesto que en el perfil del agresor sí se aprecia predominancia de los varones. Las causas que pueden hacer aparecer el acoso son incalculables. Tanto como las formas en las que se manifiesta y los perjuicios que ocasiona. En general las causas o factores que lo provocan suelen ser personales, familiares y/o escolares. En lo personal, el acosador se ve superior. Bien porque cuenta con el apoyo de otros atacantes, o porque el acosado se trata de alguien con muy poca capacidad de responder a las agresiones. El acosador lo que quiere es ver que el acosado lo esté pasando mal. LA ??NICA MANERA DE COMBATIR EL MALTRATO ES LA COOPERACION ENTRE TODOS LOS INVOLUCRADOS: PROFESORADO, PADRES Y ALUMNOS.